El Premio Longitude, que otorga 8 millones de libras (más de US$10 millones) -unas 10 veces lo que da el premio Nobel-, le fue adjudicado a un invento creado en Suecia.
La distinción fue creada hace una década en Reino Unido con la idea de premiar a quienes desarrollen nuevas herramientas en la lucha contra las bacterias resistentes a antibióticos.
El aparato galardonado es el analizador de orina PA-100, desarrollado por investigadores de la Universidad de Uppsala y comercializado por la empresa Sysmex Astrego.
Puede detectar rápidamente si una infección urinaria es causada por bacterias e identificar los antibióticos adecuados para tratarla.