Hay un intento de México por imponer en Estados Unidos su propia legislación pasando por encima de la Segunda Enmienda que garantiza a los estadounidenses la libre portación de armas de fuego, acusó el abogado de las armerías de ese país durante la audiencia de apelación en la que el gobierno mexicano planteó llevar a juicio a los fabricantes por ser parte de la violencia que se vive en el país.
“Le piden que aplique la ley mexicana a la regulación de las armas de fuego estadounidenses en este país (…) Eso significa que su fabricación y venta no se regirían únicamente por las leyes de responsabilidad civil de México, se regirían por las leyes de responsabilidad civil de todos los países del mundo”, dijo durante la audiencia Noe Francisco, abogado de Smith & Wesson que habló en nombre de todas las empresas involucradas.