En 2014, Raúl Gudiño portaba la etiqueta de promesa y con apenas 18 años fue cedido de Chivas al Porto con la esperanza de que se convirtiera en un arquero élite, pues durante su estancia por el equipo de los Dragones compartió el entrenamiento con uno de los mejores cancerberos de la historia, Iker Casillas.
En su aventura por Europa disputó juegos de Champions League con el APOEL de Chipre, pero con el correr de los años el hoy elemento de 24 años no pudo consolidarse en Europa y regresó a México con el Rebaño, equipo en el que tiene estatus de transferible en el presente mercado de fichajes.
El director deportivo de Chivas, Ricardo Peláez, mencionó que Gudiño se acercó a su oficina para pedir su salida, pues perdió la titularidad ante José Antonio Rodríguez y de cara al futuro cercano luce complicado que pueda recuperarla.
Raúl ‘Potro’ Gutiérrez, quien tuvo a Gudiño durante su etapa por la Selección de México Sub-17 y Selección Olímpica, consideró que el arquero se genera solo una presión mental, ya que es joven, pero tiene la necesidad de jugar y mostrarse.