El PSG en cuartos de final. Después de tres temporadas de sinsabores y en la noche más gélida que se recuerda en la Champions, el equipo francés consiguió superar la barrera de los octavos de final, empujado por un ultramotivado Neymar y un soberbio Di María, remontando el 2-1 con que le había derrotado en Alemania el Borussia Dortmund.
El llamado ‘objetivo de mínimos’ como es alcanzar los cuartos de final para cualquier candidato al título fue por fin conseguido por el campeón galo… Al que este reto sabe a apenas nada, después de haber invertido cerca de 1.300 millones de euros en fichajes desde 2010 y ser, solo por debajo Manchester City y Manchester United, el equipo con mayor desfase económico entre fichajes y traspasos en esta última década.
Se clasificó el PSG en un Parque de los Príncipes vacío y en una jornada en que se multiplicaron las suspensiones y competiciones alrededor de Europa, dando a entender su papel de candidato al título en una temporada que está más que nunca en el aire, con riesgo de acabar, quien sabe, abruptamente el torneo que tiene como reto máximo el multimillonario equipo francés.
La ilusión del Borussia se acabó con el final del primer tiempo. Salió decidido a voltear la eliminatoria el PSG y desde el minuto cero puso cerco a la portería de Buerki, intenso, rápido, profundo y brillante en la combinación aunque le costase encontrar el remate.
Ausente Mbappé, quien no ingresó hasta la segunda mitad, Di María se convirtió en el mejor socio de Neymar, aunque fue Cavani quien a los 25 minutos rozó el gol con un disparo cruzado, raso, que salvó con el pie el meta del Dortmund… Que no pudo hacer nada poco después, en un corner lanzado por el ‘Fideo’ y que Ney remató, en placha y desde el interior del área pequeña a la red.
El 1-0 no despertó como se esperaba al Borussia, sino que aumentó la sensación de poderío del PSG, apenas asustado por un par de incursiones de Haaland antes de que rozándose el descanso le diera lo que se adivinaba la puntilla, en una jugada empezada y acabada por el español Bernat, que recuperó el balón para iniciar una contra que continuada por Neymar acabó con un centro en diagonal de Sarabia y el toque sutil de Bernat que colocó el 2-0.
