Los cuerpos en avanzado estado de putrefacción de padre e hijo que habían sido secuestrados a mediados de diciembre en la ciudad de Reynosa, fueron encontrados en una brecha que conduce a la colonia Vamos Tamaulipas por el rumbo de El Campanario.
Una llamada anónima alertó a las autoridades sobre la presencia de los dos cuerpos, que luego de ser analizados por el departamento de Servicios Periciales se confirmó que se trata de Pedro Lerma y su hijo Daniel, quienes residían en el fraccionamiento Villarreal frente al ejido el Guerreño.
Ambos habían sido secuestrados desde el pasado 15 de diciembre, hecho que fue denunciado en su momento a las autoridades aunque solo se localizó la camioneta en que viajaban al momento de ser levantados, ignorándose hasta el momento si su familia pagó rescate o si existe algún indicio por el que fueron ultimados.