En medio de una verdadera tormenta se encuentra el Partido Acción Nacional (PAN), ya que pese a la cercanía de las elecciones del presente año para renovar el Congreso del Estado no cuenta con cuadros que garanticen un triunfo.
Lejos está aquel 2016 cuando el entonces candidato Francisco Javier García Cabeza de Vaca, hoy gobernador de la entidad, marcaba una tendencia de triunfo a la que muchos alzaban la mano por subirse sabedores que llegarían a su meta.
No por nada hoy la Legislatura tamaulipeca es completamente azul, quedando reducido a su mínima expresión el priismo y el resto de las fuerzas políticas estatales, ya que quien manda y decide ahí es el gobernador.
Pero Cabeza tiene un severo dolor de cabeza, ya que no por más que echa números no hay quien le garantice que seguirá manteniendo el control de los diputados y prevé tomarse con un Congreso pintado de guinda.
Para colmo en municipios como Tampico donde gobierna el PAN, la situación es verdaderamente compleja ante la falta de trabajo o de acercamiento del los actuales servidores público .
Figuras como Marcela Cabal, directora municipal de Bienestar Social y hermana del gerente de la COMAPA, Adolfo Cabal Rúiz, es de los nombres que suenan, así como el empresario César Amor, quien en la elección pasada quizo lanzarse a alcalde.
Y es que en nada apoya la falta de resultados y presencia de las actuales diputadas locales Maria de Jesús Gurrola Arellano y Maria del Carmen Tuñon Cosio, quienes han pasado de noche por el Congreso de Tamaulipas.
En el caso de Madero han alzado la mano personalidades como el ex alcalde Andrés Zorrilla Moreno, quien en tanto no aclare las acusaciones en su contra pocas posibilidades tiene de llegar; el empresario Jaime Turrubiates Solís, quien pese a ser aun priista tiene considerado lanzarse por el blanquiazul, o incluso el actual diputado Joaquín Hernández Correa.
El caso es que con la tempestas que se mantiene en el PAN, la lucha de poder interna y la falta de acuerdos el PAN luce remojado y sin consistencia, quedando muy lejos la posibilidad de ganar en las elecciones del 2 de junio.