La costa sur de Tamaulipas, concretamente playa Miramar, conjunta en este año las características idóneas para recuperar el esplendor arrebatado por la inseguridad que azotó el Estado desde el año 2010.
Este destino turístico es considerado el más importante de la identidad al congregar sólo en Semana Santa entre el 65 y 70 % de los paseantes que elijan este estado para pasar su periodo de asueto.
La blanca y suave arena, aunado al agua limpia y buena ubicación la colocó hasta el 2009 en el tercer destino carretero de todo el país, sólo por debajo de sitios como Acapulco, al atraer a los turistas de la región noreste del país.
En el 2010 todo cambió las balaceras, levantones y el ambiente de total inseguridad hicieron que Miramar se desdibujara del panorama turístico nacional y se ligará, como todo Tamaulipas, a la actividad del narcotrafico.
Alcaldes como Jaime Turrubiates Solis en los años 2011 al 2013, Esdras Romero Vega de octubre el 2013 a Enero del 2015, y Mario Neri de Enero del 2015 a Enero del 2016 trataron de repuntar los números rojos pero en el último lustro la recuperación no alcanzó para llegar a las buenas cifras del 2009.
Se hizo uso de la marca Tampico-Miramar, impulsada por Egidio Torre Cantú y los hoteleros pero con la llegada de Francisco Javier Cabeza de Vaca esta fue desechada dando paso a una estrategia estatal de promoción turística.
José Andrés Zorrilla Moreno a puesto en marcha un agresivo programa para posicionar a Miramar como el mayor atractivo del sur de Tamaulipas respaldado por empresarios pero sobre todo por las acciones que vienen realizándose en el bulevar Costero.
Si bien es cierto no se trata de las mega obras de infraestructura turística si se está realizado focalizado de la playa maderense con rehabilitación de banquetas, camellones, estacionamientos, los accesos de la avenida Tamaulipas, Madero y paseo Doña Cecilia.
Se arrancó la obra de rehabilitación de la glorieta anteriormente conocida como “Los Delfines” donde en su lugar quedará un letrero gigante con la leyenda “Miramar”, pero este quedara hasta Mayo.
Otro de los factores beneficios en este año es el de la temporalidad, ya que semana Santa es hasta la mitad del mes de Abril lo que favorece que el clima sea más cálido y con menos posibilidades de norte.
Miramar no sólo es una playa con mediana infraestructura turística, una gran cantina como la han querido hacer ver, un sitio que dejó de ser atractivo para los inversionistas o una playa con concesiones abandonada; esta, nuestra playa, da empleo a cientos de personas que esperan Semana Santa para mejorar sus ventas, es pieza importante de la economía regional, pero sobre todo icono y emblema de todo Tamaulipas.
